"Científicos de la Universidad de Salamanca (España) han iniciado una
nueva línea de investigación que tiene como objetivo final obtener,
mediante impresión 3D, piezas destinadas a intervenciones quirúrgicas
maxilofaciales, según informa la Agencia Iberoamericana para la Difusión
de la Ciencia y la Tecnología y la página web oficial de la universidad
salmantina.
La idea que se plantea a largo plazo es crear estructuras que puedan
servir de contención a nuevos materiales que permitieran la regeneración
ósea, por ejemplo, de una mandíbula, lo que sería útil para pacientes
que hayan sufrido una pérdida grave de hueso. Posteriormente, sobre esa
base se podrían realizar implantes dentales.
“Estamos en una fase incipiente”, afirma en declaraciones a DiCYT
Javier Montero, investigador de la Clínica Odontológica de la Facultad
de Medicina y promotor del estudio, pero en un futuro “podríamos diseñar
exactamente lo que necesita cada paciente”. Hasta ahora existen algunas
experiencias, como ciertas piezas diseñadas en titanio para pacientes
oncológicos, pero la idea es “aplicar una tecnología barata para
solucionar problemas complicados”.
Hay personas que no pueden beneficiarse de una reparación dental
porque han perdido hueso sobre el que insertar un implante. “Una posible
solución es quitarles hueso de otra parte del cuerpo, como una cadera,
pero estas operaciones generan una mayor morbilidad al paciente. Por
eso, nosotros apostamos por una intervención para colocar una pieza
rígida ad hoc que favorezca la regeneración del hueso con la forma de lo
que necesitaremos en el momento de colocar el implante”, agrega el
experto.
El reto es encontrar materiales que con el paso del tiempo
desaparezcan a medida que se va regenerando el hueso propio. Se trataría
de colocar “un andamiaje”, una cavidad ósea con biomateriales que
hiciera de barrera de contención y permitiese que el hueso del paciente
rellenase ese espacio. De esta forma, personas que han perdido parte de
la mandíbula recuperarían la capacidad de recibir implantes. De momento,
“solo es una fantasía”, reconoce, pero “por ahí va el futuro”.
El problema de la impresión 3D es que requiere fundir los materiales a
temperaturas muy elevadas, de manera que “los materiales se
desnaturalizan”. Materiales como el colágeno, que ya se aplican en
odontología, no se podrían utilizar con esta tecnología. Por eso, los
investigadores ya están pensando en otras posibilidades, como el ácido
poli-láctico (PLA) o el ácido poliglicólico (PGA).
El proceso de investigación será lento. Los primeros pasos se centran
en la búsqueda bibliográfica de los materiales más adecuados, para
pasar posteriormente a realidad pruebas de biocompatibilidad y otras que
garanticen que sus propiedades son similares a las del hueso que se
pretende suplir. Más tarde, se realizarían ensayos in vitro y con
animales y, si todo el proceso da buenos resultados, finalmente llegaría
a aplicarse a pacientes que podrían mejorar sensiblemente su calidad de
vida.
“Estamos abiertos a colaboraciones”, señala Javier Montero, ya que el
principal obstáculo al que se enfrenta esta nueva línea de
investigación es la falta de medios, que esperan compensar con
conocimientos y buenas ideas.
El número de personas que puede tener estos problemas es reducido,
así que en teoría serían pocos los beneficiados, pero sin una tecnología
que permita realizar estas intervenciones de forma económica los
pacientes convencionales no podrán acceder a estos avances ni los
sistemas de salud podrán financiarlos." (Imprimalia, 06/03/16)
2 comentarios:
Que padre, que se estan tomando muy en serio los Implantes dentales, para generar no solo nuevos productos de calidad, si no también tecnicas para la colocación, etc.
antes que se me olvide los invito a conocer la clinica :D Consultorios Dentales en Cancun
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